La aprobación del misoprostol como una droga para uso ginecológico “es el triunfo de un reclamo que venimos planteando hace mucho tiempo”, destacó a AIM la referente del colectivo feminista Isadora, Malena Lenta, quien reclamó por “la producción nacional pública del fármaco”, ya que “el laboratorio Beta se está haciendo millones con su venta”. En ese sentido, remarcó: “Queremos la nacionalización para abaratar los costos del sistema de salud y de las mujeres que lo requieran”.

“La aprobación del misoprostol por la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (Anmat) es el triunfo de un reclamo que venimos planteando hace mucho tiempo”, afirmó a esta Agencia Lenta, quien aclaró que ahora, su uso ginecológico está reglamentado.

Asimismo, destacó la importancia de que el misoprostol no tenga diclofenac, lo que “es mucho mejor para las mujeres”, ya que “se trata de una droga que se tiene que utilizar para las interrupciones de los embarazos”, remarcó a AIM.

También “es un triunfo con las obras sociales, que podrán cubrir la medicación que, si bien ya se encontraba en el sistema público de salud, no estaba disponible en otros lugares”. No obstante, “seguimos reclamando para que se legalice el aborto. La aprobación del misoprostol es un paso importantísimo, pero falta mucho más”, aclaró.

“Queremos el aborto legal, porque se siguen muriendo mujeres y continúa siendo un medicamento caro aún cuando lo cubran las obras sociales, que cada vez tienen menos alcance por la crisis”, explicó.

Asimismo, Lenta hizo referencia a la importancia y necesidad de la legalización en Argentina de la mifepristona, que es otra droga que se utiliza en conjunto con el misoprostol para las interrupciones de los embarazos. “En un montón de países del mundo esta combinación es más efectiva”, indicó.

La dirigente también reclamó por la producción nacional pública de misoprostol, ya que otro tema “importante” es que “el laboratorio Beta que introduce el fármaco se está haciendo millones con la venta de un producto que es caro”.  Por eso, “queremos la nacionalización para abaratar los costos del sistema de salud y de las mujeres que lo requieran”.