En línea con el plan del Gobierno de lograr una mayor integración energética entre Argentina y Chile, ambos países suscribieron un acuerdo por en el cual en el corto plazo para cubrir la necesidad de gas natural de los dos países.
Según el acuerdo, Chile podrá exportar hasta tres millones de metros cúbicos diarios de gas licuado durante el mes de julio. El capítulo actual del "swap energético" que se instituyó a fines del año pasado está apuntado específicamente a ese mes por la mayor demanda energética durante el invierno.
El acuerdo general, firmado en diciembre del año pasado, busca cubrir los problemas de abastecimiento de los dos países. El contrato marco firmado este miércoles es el tercero de su tipo. "El inicio de un tercer envío consecutivo de gas natural a Argentina representa un gran avance hacia la integración energética entre ambos países", dijo Marcelo Tokman, gerente general de Enap.
El acuerdo firmado es dentro del marco general de intercambios energéticos que buscan una mayor integración entre ambos países
Desde la cartera de Energía consignaron que el abastecimiento que se efectuará en julio no es porque haya un faltante de gas argentino, sino que irá dirigido principalmente a reemplazar el combustible líquido usado para la generación eléctrica. Es decir, no hay un déficit de producción interna sino que el intercambio apunta a cubrir la mayor demanda eléctrica durante el mes más duro del invierno.
La exportación chilena será compensada luego con un envío de gas argentino a Chile durante enero, cuando la demanda de gas para la generación eléctrica baje, explican desde la cartera a cargo de Javier Iguacel, debido a que Chile no cuenta con producción propia de gas licuado. En términos generales, la expectativa es que en línea con el desarrollo de la explotación de Vaca Muerta, la necesidad del intercambio durante invierno sea menor.
También afirman que el precio final para el gas todavía no se fue acordado. Pero cálculos oficiales estiman que el ahorro entre 2017 y 2016 dado el precio del combustible fue de cerca de 100 millones de dólares.
El contrato actual fue suscrito entre la empresa chilena Enap y la estatal argentina Ieasa. Los envíos de gas natural se realizarían por medio de los gasoductos Electrogas y GasAndes, que une a Santiago de Chile con Mendoza.