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Caleidoscopio
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Tolstoi comenzó su vida en un alto nivel social.
Tolstoi comenzó su vida en un alto nivel social.

León Tolstoi

El 10 de enero de 1883, se cumplirán 144 años, nació en Yasnaia Poliana el gran escritor ruso Aleksei Nikolayevich Tolstoi, hijo de un terrateniente de la nobleza y de una rica princesa, María Volkonski.

De la gran ciudad, el joven Tostoy esperaba la vida de placeres, lujo y derroche a la que parecía destinado por nacimiento; pero del campo, por el que creció su devoción con los años, le vinieron sus sueños literarios, que lo convirtieron en uno de los mayores artistas rusos y que haya sido considerado un santo.

La princesa su madre murió cuando él tenía dos años y el padre en 1837. Vivió desde entonces con dos tías, pero su educación quedó al cuidado de preceptores que no fueron muy cuidadosos con su formación.

En 1843 entró en la Universidad de Kazán, donde estudió letras primero y derecho después. Fue muy mal alumno, al punto que se ha dicho que no se hubiera matriculado si no mediara su condición de miembro de la alta nobleza.

El propio Tostoy narra que, adolescente, carecía de convicciones morales, y se entregaba sin pena ni reproche al alcohol, el juego y las mujeres, sin obligaciones ni metas de ninguna clase.

Pero cuando abandonó la universidad se refugió entre los campesinos de Yasnaia Poliana, donde su conciencia sufrió una tremenda transformación debida al espectáculo de miseria y dolor que advirtió en los campesinos siervos, cosa a la que había permanecido indiferente como era el caso de toda la nobleza rusa de su tiempo.

Concibió la idea de consagrarse al mejoramiento y enmienda de las condiciones de vida de los pobres, pero no sabía por dónde empezar. A instancias de su hermano Nicolás se inscribió en el Ejército y fue nombrado oficial de artillería.

Cuando se enfrentó con los tártaros en el Cáucaso tomó conciencia de su temeridad y aprendió a despreciar la muerte, además de conocer paisajes que se le marcaron para siempre en la mente, aunque ya de niño estaba impresionado por la naturaleza. Ese fue posiblemente el origen de su fe panteísta y de su misticismo tan fuerte y singular.

Después de participar de la guerra de Crimea en 1853, pidió el retiro desilusionado de la ineptitud de los generales que hacían esteril el heroísmo de los soldados, y se dedicó por entero a escribir.

De viajes por Francia, Alemania y Suiza trajo a Rusia ideas pedagógicas revolucionarias. Abrió una escuela para pobres en Yasnaia Poliana. En ella la enseñanza era gratuita, los alumnos podían entrar y salir de clase a su antojo y jamás, por ningún motivo, se procedía al más mínimo castigo. En cierto modo, fue el inicio de lo que se ha considerado luego el anarquismo de Tostoy.

La escuelita fue tan novedosa que el gobierno puso sus ojos represores en ella y mandó cerrarla, debido a que Toltoy empezó a denostar contra la censura y a pedir libertad de palabra para todos, incluidos los opositores políticos. También tuvo conflictos con la iglesia ortodoxa rusa, de la que denunció su liturgia costosa, lujosa y recargada, la abundancia de iconos, el olor a incienso y la vida superficial de los popes.

Para no evitar enemigos, la emprendió contra su viejo amor, el Ejército, contra el que recitó el Sermón de la Montaña recordando que toda forma de violencia es contraria a la enseñanza de Cristo. Así se ganó el odio de los militares de profesión e incluso del zar. En febrero de 1861 concedió la emancipación a sus propios siervos, que habituados por siglos de respeto reverente a los popes y al zar, nunca entendieron a Tolstoy y siempre desconfiaron de él.

En 1862, después de la muerte muy sentida de su hermano Nicolás, comenzó a vivir permanentemente en Yanaia Poliana con su esposa, Sofía Behrs, hija de un médico de Moscú. Con ella vivió toda su vida, y fue para él una compensación de su falta completa de sentido práctico, la persona que sabía sacarlo del abismo de sus fantasías.
Sofía le dio el marco que necesitaba para escribir su gran obra ,"La Guerra y La Paz", la epopeya de la invasión de Rusia por Napoleón en 1812, en la que recrea la vida de 500 personajes. El abultado manuscrito fue pacientemente copiado siete veces por la esposa a medida que el escritor corregía; también era ella quien se ocupaba de la educación de los hijos, de presentar a las niñas en sociedad y de cuidar del patrimonio familiar.

La Guerra y La Paz, un monumento de la literatura, le dio fama en Rusia y en Europa, e influyó en la literatura posterior. No obstante, Toltoy, lejos de regocijarse con la fama conseguida, entendió que se trataba de una forma nueva de pecado porque implicaba vanidad y soberbia.

Tolstoy fue autor después de la Guerra y la Paz de cerca de un centenar de obras, entre ellas Ana Karenina (1875-1876), donde relata una avasalladora pasión adúltera, y La sonata a Kreutzer (1890, nombre de una obra de Beethoven), condenación del matrimonio, La muerte de Iván Ilich (1885). A pesar de ser un eximio creador, intentó destruir teóricamente el arte en su obrita "Qué es el arte".

Al final de su larga vida, en que compartió todo con los campesinos pobres, predicó con el ejemplo su doctrina de la pobreza, trabajó como zapatero durante varias horas al día y repartió limosna. No fumaba, no bebía alcohol y se sometía a una dieta vegetariana estricta, de modo que tras distanciarse de los nobles, los militares, el zar, los popes y los literatos, también sintió la frialdad de su familia, que lo consideraba un extravagante incomprensible.

Cuando decidió morir, ya octogenario, abandonó su hogar en secreto con el doctor Marivetski, que había dejado su rica clientela de la ciudad para seguir los pasos de Tolstoy. Dejó una carta a Sofía y partió en la madrugada del 10 de noviembre de 1910 con su ropa blanca y algunos libros.

Días después, el invierno ruso le provocó un ataque pulmonar que lo obligó a detenerse y a buscar refugio en la casa del jefe de estación de Astapovo. Sofía llegó antes de que falleciera, pero no quiso turbar la paz del moribundo y no entró en la alcoba hasta después del final. Le dijeron que su últimas palabras habían sido: "Amo a muchos." Ella merecía su amor más que todos.

Tolstoi comenzó su vida en un alto nivel social, por su pertenencia de clase. No dudó en aprovechar todas las ventajas que su posición le ofrecía en materia de placeres mundanos. Pero a medida que fue madurando, se fue despojando de muchas cosas para terminar viviendo entre los campesinos pobres como uno de ellos.

Mientras fue creando sus grandes obras fue experimentando el desasimiento en grados cada vez mayores, hasta al final perder casi voluntariamente incluso la vida, llegado a una cúspide de conciencia muy diferente a la habitual en las alturas sociales en que había nacido.

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