La adolescente de 17 años murió por asfixia. La estrangularon y la enterraron aún con vida.

El resultado de las pericias puso este martes en el centro de la investigación por el femicidio de Agustina Imvinkelried en Santa Fe el Renault 21 que pertenecía al presunto asesino, quien se ahorcó antes de ser detenido. Los investigadores intentan determinar si la adolescente de 17 años fue atacada dentro de ese vehículo.

Los peritos encontraron dentro del auto de Pablo Trionfini nueve huellas dactilares y dos cabellos que son analizados ahora por los forenses para comprobar si pertenecen a Agustina. Si bien no advirtieron signos de violencia dentro del vehículo, no descartan que ese haya sido el lugar en donde se inició el ataque contra la víctima.

La hipótesis surgió después de que el auto de Trionfini fuera captado por las cámaras de seguridad cerca del boliche del que se acababa de retirar la adolescente y apunta a que el sospechoso "levantó" a la víctima en una estación de servicio.

El otro núcleo de la investigación por estas horas está puesto sobre el celular de Trionfini en busca de posibles mensajes que demuestren si mantenía una relación previa con Agustina. En tanto, el teléfono de ella no pudo ser encontrado todavía.

Agustina fue encontrada asesinada el lunes en una zanja a unos 300 metros del boliche al que había ido a bailar con sus amigas en Esperanza. La autopsia determinó que fue asfixiada manualmente poco después de su desaparición y que la semienterraron viva.

La declaración de varios testigos y las cámaras de seguridad convirtieron a Trionfini en sospechoso durante las primeras horas de búsqueda pero cuando la policía llegó a su casa para interrogarlo lo encontró colgado de una viga.

Tn.-