Antonio Borro, delegado de la rama Verde y Blanca Gualeguay de la Asociación Trabajadores del Estado (ATE), y paritario nacional del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa), criticó el rol que está sosteniendo la dirigencia de este organismo. Según explicó a AIM, su titular, Ricardo Negri, es una persona que no tiene el poder ni la capacidad para hacer frente a las decisiones de despidos tomadas desde el Ministerio de Modernización. También mostró su preocupación por las negociaciones con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
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A fines de la semana pasada esta Agencia dio a conocer la reincoporación de 54 trabajadores del Senasa en todo el país. Si bien fue una conquista que se celebró, desde ATE se sostuvo la exigencia de devolver el puesto laboral a la totalidad de los 344 despedidos.
Sobre esta situación de despidos se manifestó Borro, quien calificó como “perverso” el rol que cumple el Ministerio de Modernización, a la vez que cuestionó la figura de Ricardo Negri, presidente del Senasa.
“Es notable el grado de perversidad que tuvo el Ministerio de Modernización enviando los telegramas de despido en una planilla de Excel y en fechas claves, como a fin de año o un día antes del Día del Trabajador”, sostuvo, recordando que “hay personas que dejaron su alma en Senasa, como un veterinario que despidieron en Concepción del Uruguay con 15 años de antigüedad, quien además cumplía sus tareas ejemplarmente”.
Asimismo, expresó su descontento con la dirigencia de Senasa, dado que son autoridades "sin peso y que están sobrepasadas por las medidas que toma el Gobierno”. Por tal motivo, explicó que “Negri puede decir que no habrá más despidos (NdR: expresión de Ricardo Negri del 7 de mayo), pero son palabras sin sustento. La firma con el pacto con el Fondo Monetario Internacional (FMI) necesitará un mayor ajuste, lo que se traducirá en despidos, y sobre esto Negri no tendrá injerencia. Dirá que fue una medida tomada desde el Ministerio de Modernización y se lavará las manos.”
En tal contexto, recordó que “quienes desempeñan el rol de paritario nacional buscan permanentemente mesas de diálogo, pero cuando estas logran convocarse no tienen carácter resolutivo, porque las palabras allí expresadas no se toman a la hora de resolver si habrá o no despidos”.
Más despidos
“Acordar con el FMI hace pensar en el menemismo y en épocas en donde se produjeron reformas que significaron 650 mil trabajadores en la calle”, reflexionó Borro. Además, consideró que “en este nueva etapa, el Fondo exigirá muchos más despidos”, por lo que sostuvo que “no se vio ni el 10 por ciento de lo que está por venir”.
“Por eso se solicita organización de los trabajadores en todo Entre Ríos. Y no solo de las dependencias del Estado, porque el plan de ajuste del macrismo es cínico y perverso, y alcanzará a un amplio sector obrero”, señaló.