Saltar menúes de navegación e información institucional Teclas de acceso rápido

El clima hoy en:

-

- -

El dólar hoy: (BCRA)

$836,0 / $876,0

Salud y Bienestar
Salud y Bienestar

Día internacional de la Encefalitis

El 22 de febrero conmemoran el día internacional de la Encefalitis, inflamación del cerebro que es causada por una infección que ataca al cerebro (infeccioso); o a través del sistema inmune que ataca al cerebro por error (Encefalitis post-infecciosa o autoinmune). Afecta indiscriminadamente a niños y adultos y es muy necesario que se concientice sobre como prevenirla, su tratamiento, etc., registró AIM.[{adj:36688 alignright}]

Esta enfermedad afecta indiscriminadamente a niños y adultos, sin importar, la edad, el sexo, el origen étnico, social o cultural. La tasa de mortalidad es alta y aquellos que sobreviven pueden padecer daño cerebral adquirido. El grado y severidad de las secuelas varía. Y entre ellas puede incluir consecuencias físicas, emocionales, o psicosociales.

Síntomas

Los tipos de síntomas que se observan en la Encefalitis reflejan las áreas específicas del cerebro afectadas por la inflamación. Estos síntomas y sus grados de desarrollo varían ampliamente y pueden hacer el diagnóstico de la encefalitis sea difícil.

La encefalitis infecciosa comienza frecuentemente con una enfermedad o dolor de cabeza similares a la gripe. Normalmente los síntomas más graves siguen horas o días después. El primer síntoma de alerta debería ser una alteración en el nivel de conciencia. Esto puede ir desde una leve confusión o somnolencia a pérdida de conocimiento y coma. Otros síntomas incluyen fiebre alta, convulsiones, la aversión a las luces brillantes, incapacidad para hablar o controlar el movimiento, los cambios sensoriales, rigidez en el cuello, o comportamiento inusual.

Las encefalitis autoinmunes puede presentar de manera muy diferente a la encefalitis infecciosa, los rasgos más distintivos son síntomas prominentes psiquiátricos, convulsiones, confusión y pérdida de memoria. Los pacientes podrían mostrar comportamientos extraños. Típicamente de 10 a 20 días más tarde, los pacientes desarrollan un trastorno del movimiento, las variaciones en la presión arterial, la frecuencia cardiaca y la fiebre pueden ser menos clara.

Algunas personas también pueden experimentar alucinaciones y pesadillas vívidas durante el período agudo de la encefalitis. Estos pueden ser muy angustiante para el interesado y la familia que puedan presenciar su angustia. Esta fase suele cesar cuando la inflamación del cerebro disminuye.

Causas de la encefalitis

La causa de la encefalitis son infecciones por virus neurotropos, es decir, virus que tienen una especial afinidad por el sistema nervioso central. Estos virus se pueden transmitir de diferentes formas; algunos de ellos por vía respiratoria (como el virus del sarampión), algunos por vía fecal-oral (como el virus de la polio) y otros incluso por vía sexual (como el virus del herpes simple tipo 2). Los principales virus que pueden causar encefalitis son:

Virus del herpes simple tipo 1 ó 2 (VHS): son los virus que causan el inocente herpes labial o el herpes genital. El virus permanece en los ganglios nerviosos toda la vida, y de vez en cuando migra a la piel provocando ampollas y escozor. En algunos pocos casos el virus puede equivocarse y migrar hacia el sistema nervioso central provocando una encefalitis.

Otros virus tipo herpes: dentro del grupo de los virus del herpes hay otros que pueden provocar encefalitis, además de otras enfermedades. Algunos de ellos son el virus Epstein-Barr (responsable de la mononucleosis infecciosa), el citomegalovirus (CMV), o el virus de la varicela (que también produce el herpes zóster).

Virus transmitidos por mosquitos: son los llamados arbovirus. Aparecen sobre todo en regiones concretas de mundo, como el Virus del Nilo Occidental o el virus de la encefalitis japonesa (que se encuentra también en el sudeste asiático). Otros virus que producen encefalitis se transmiten por mordeduras de animales, como el virus de la rabia.

Virus pediátricos: el sarampión, las paperas y la rubéola pueden causar encefalitis agudas. La vacunación de todos los niños ha hecho que los casos disminuyan en toda la población.

VIH: el VIH puede producir una encefalitis desde el primer contacto (poco frecuente) o en alguna de las reactivaciones del virus por abandono del tratamiento antirretroviral.

Entrar en contacto con alguno de estos virus no significa que vayas a desarrollar una encefalitis seguro. De hecho, muchos de estos virus son conocidos por otras enfermedades más específicas. Que aparezca una encefalitis depende además de otros factores como la edad (los más jóvenes y los ancianos tienen más riesgo) y el estado del sistema inmunológico.

Diagnóstico de la encefalitis

El diagnóstico precoz de la encefalitis es esencial para proporcionar un tratamiento específico, si lo hay, y controlar los síntomas para evitar un daño cerebral grave. El aspecto más importante para llegar al diagnóstico de esta patología son los síntomas clínicos, que pueden ayudar al médico a sospechar la enfermedad. Para ello, el médico realizará una entrevista clínica al paciente, y en la mayoría de los casos también a los familiares.

Dentro de las pruebas complementarias para diagnosticar que se pueden realizar para diagnosticar la encefalitis la más importante es la punción lumbar. Gracias a ella se obtiene líquido cefalorraquídeo (que es el líquido que lubrica al cerebro), y se puede analizar en el laboratorio en busca de alteraciones características de infección viral. El análisis de laboratorio que resulta esencial es la PCR (reacción en cadena de la polimerasa), que detecta la presencia o no de los virus que provocan encefalitis más frecuentemente en el líquido cefalorraquídeo.

Otras pruebas importantes para detectar una encefalitis son las pruebas de imagen del sistema nervioso central como la tomografía computarizada (TC) y la resonancia magnética (RMN). La TC se debe realizar siempre antes de hacer una punción lumbar, para comprobar que no hay grandes alteraciones internas y que la punción se puede realizar bien. La RMN no es una prueba que se realice de urgencia, pero es útil hacerla los días u horas posteriores al inicio de los síntomas, porque a veces las encefalitis provocan un brillo del cerebro en estas imágenes. Una prueba también útil es el encefalograma (EEG) porque permite conocer si hay daño de la actividad eléctrica cerebral y estima las probabilidades de que quede una epilepsia como secuela.

Tratamiento de la encefalitis

El tratamiento ideal de la encefalitis debe cumplir tres puntos clave: controlar los síntomas, eliminar el virus del sistema nervioso, y prevenir la aparición de secuelas neurológicas permanentes.

Control de los síntomas: medidas generales como permanecer tumbado con la cabecera de la cama elevada, y beber abundantes líquidos, ayudan muchísimo a mejorar el malestar general y los dolores de cabeza y articulares. Se utilizan con mucha frecuencia analgésicos y antiinflamatorios (como el paracetamol o el ibuprofeno) para bajar la fiebre y eliminar el dolor. Los corticoides también se utilizan en todos los casos, ya que ayudan a disminuir la inflamación cerebral de forma directa y eso disminuye las probabilidades de aparición de secuelas.

Eliminación del virus: no todos los virus tienen un tratamiento específico con el que eliminarlos del sistema nervioso. Tan sólo los virus de la familia del herpes pueden ser atacados mediante fármacos antivirales. El primero en descubrirse fue el aciclovir, que se utiliza también en la varicela de los adultos, o para prevenir el herpes genital. Otro fármaco conocido es el ganciclovir, que tiene especial utilidad en las infecciones del citomegalovirus (CMV). En los últimos años se han estudiado fármacos nuevos más potentes, como el foscarnet, y gracias a la gran inversión en investigación de VIH pronto estarán disponibles nuevos medicamentos antivirales.

Prevención de secuelas permanentes: la aparición de secuelas se previene con el tratamiento precoz desde todos los frentes. Una vez finalizados los síntomas de la encefalitis se podrán realizar pruebas para comprobar realmente qué daño residual ha quedado en el cerebro y, una vez identificado, se pueden pautar distintas terapias:

Terapia del lenguaje: permite recuperar el habla, el entendimiento o la escritura de una lengua concreta.

Terapia física: consiste en ejercicios físicos para mejorar la fuerza muscular, la movilidad, la marcha y la coordinación.

Terapia ocupacional: consiste en mejorar distintas capacidades neurológicas a través de la realización de actividades cotidianas (hacer la cama, cocinar, manualidades, etcétera).

Prevención de la encefalitis

La prevención de la encefalitis viral consiste en adoptar las medidas básicas que previenen cualquier otra enfermedad viral, desde un catarro a una gastroenteritis. En los casos de virus más específicos (rabia, encefalitis japonesa, VIH…) se tomarán medidas extra. En general, estos los consejos para prevenir la aparición de esta infección:

Respetar las medidas de higiene: lavarse las manos antes de comer o al ir al baño, estornudar en pañuelos y no compartir cubiertos, son algunas de ellas.

Lavar frutas y verduras antes de comerlas, con agua y dos gotas de lejía.

Mantener relaciones sexuales con preservativo.

Vacunarse y vacunar a los niños de los virus que con más frecuencia provocan esta enfermedad.

Protegerse de las picaduras de mosquitos en lugares de riesgo, utilizando manga larga, repelente de insectos, mosquiteras, etcétera.

encefalitis

Dejá tu comentario sobre esta nota

Artículos Relacionados

Teclas de acceso