El presupuesto del año próximo deberá reflejar el plan de ajuste que el gobierno argentino presente al Fondo Monetario Internacional ( FMI ). En ese marco, será inevitable que el presidente Mauricio Macri busque un acuerdo con los gobernadores.
A la hora de definir recortes, las transferencias no automáticas a las provincias son una de las variables en estudio. Y, más allá de que los mandatarios provinciales peronistas insisten en que el mayor déficit es de la Nación, la mirada del FMI es integral y el acuerdo las incluirá, según descartan en las gobernaciones. El rojo consolidado de las provincias es inferior al 1% del PBI; a septiembre de 2017 (último dato disponible), 17 de 24 jurisdicciones mostraban déficit.
Un trabajo de la Fundación Mediterránea Ieral apunta que los mayores desequilibrios se registran en las provincias patagónicas y en las del norte, como Jujuy, Chaco y Salta.