Los precios del trigo subieron ayer entre el 3,4 y el 3,2 por ciento en las Bolsas de Chicago y de Kansas, tras una ola de rumores sobre la posibilidad de que Rusia, el principal proveedor mundial del grano fino, restrinja sus exportaciones, como consecuencia de una producción inferior a la obtenida en la campaña precedente.[{adj:5963 alignright}]Al cierre de los negocios, las pizarras de Chicago reflejaron alzas de US$6,71 y de 6,52 sobre los contratos septiembre y diciembre del trigo, cuyos ajustes fueron de 205,95 y de 213,02 dólares por tonelada. En Kansas, las mismas posiciones ganaron US$6,43 y 6,24, mientras que sus valores de cierre fueron de 207,60 y de 217,52 dólares por tonelada.

La corriente alcista, ejecutada por los grandes fondos de inversión especuladores, se originó en un cable de la agencia Reuters difundido antes del inicio de la rueda diaria en el mercado estadounidense, en el que se informó que durante una reunión en el Ministerio de Agricultura de Rusia se les había indicado a los exportadores que las ventas externas de trigo se cerrarían cuando se supere el cupo de 30 millones de toneladas.

Desde el organismo ruso se desmintió la noticia y se aclaró que la previsión de saldo exportable para el ciclo 2018/2019 (va de julio a junio) se mantiene en 35 millones de toneladas. "Durante la reunión no se discutió sobre restricciones a las exportaciones de granos", informó el Ministerio de Agricultura ruso. Cabe recordar que durante la campaña 2017/2018 Rusia exportó 40,90 millones de toneladas del cereal, un volumen récord histórico.

No obstante la desmentida oficial, el mercado dio muestras de tomar por válida la posibilidad de que algún tipo de restricción a las exportaciones de trigo ruso aparezca en el transcurso del ciclo comercial y que ella les brinde a los vendedores de los Estados Unidos más facilidades para colocar su mercadería. Durante la rueda, los fondos de inversión compraron unos 10.000 contratos, equivalentes a 1,36 millones de toneladas.

 

La Nación.