Los meros y otros peces, los delfines, los cisnes, los flamencos, los albatros, los pingüinos, los bisontes, las avestruces, los osos koalas, los orangutanes y otros monos, las mariposas y otros insectos y muchos más parientes nuestros del reino animal tienen relaciones homosexuales, hembra con hembra, macho con macho, por un rato o para siempre.
Menos mal que no son personas: se salvaron del manicomio.
Hasta el día de hoy del año 1990, la homosexualidad integró la lista de enfermedades mentales de la Organización Mundial de la Salud.
Capítulo para el 16 de mayo del libro Los hijos de los días de Eduardo Galeano, Ed. Siglo XXI, Buenos Aires, 2012.