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De Urquiza a nuestros días, historia y resurgimiento de la vitivinicultura en Entre Ríos

Entre Ríos recupera, poco a poco, su historia como productora de vinos de calidad, con viñedos que corren paralelos al río Uruguay, desde Gualeguaychú hasta Concordia, Federación y Chajarí. Gustavo Isaack, vicedecano de la Facultad de Bromatología de la Universidad Nacional de Entre Ríos (Uner) y docente de la cátedra de Enología e Industria de la Fermentación, repasó la historia sobre los viñedos de Justo José de Urquiza, y como la provincia dejó de ser y volvió a ser productora de vinos.

En diálogo con Radio Uner en su frecuencia de FM 100.3 mhz de Gualeguaychú, Isaack recordó que “la historia de la vitivinicultura en Entre Ríos comienza en el Siglo XIX. Justo José de Urquiza fue el impulsor de la plantación de viñedos en la provincia en el año 1863. Se trajeron Vides desde Francia y después otros inmigrantes también trajeron. Pero fue Urquiza el primero en el Palacio San José, con más de 20 cepas de Malbec y Cabernet. En 1907, Entre Ríos llegó a ocupar el cuarto lugar en el centro Nacional de Viñas, con casi cinco mil hectáreas. En ese año teníamos 4.900 hectáreas de plantación de vid y más de 30 bodegas. En el patio de parral del Palacio fue donde se plantaron las primeras vides y después se fueron desarrollando en San José, Concordia, Victoria, Federación por los inmigrantes llegados desde Italia, España, Francia”.

Todo eso se terminó en un año: “En 1934, en el gobierno de Agustín Pedro Justo y por medio de una ley, se impuso una Junta Reguladora de Vino y en 1935, a través de un decreto, se ordenaba la erradicación de los viñedos de la zona de Entre Ríos. No fue sólo eso, se rompieron toneles y derramaron vino, desanimando la actividad en la región y nombrando a la Región de Cuyo como la única productora de vino, con Mendoza y San Juan en primer lugar”. Así las actividades económicas principales que quedarían para Entre Ríos serían la agricultura y la ganadería.

Issack explicó que “la zona de Cuyo es muy seca, llueve poco y no hay problemas de enfermedades de hongos, pero no tiene agua y por eso funcionan con riego artificial”. Esa región funcionó en soledad como productora de vinos, “hasta que en 1993 hubo una nueva legislación regulatoria vitivinícola, liberándose la plantación nuevamente para nuestro territorio, poniendo fin a las prohibiciones”. Esto permitió que Entre Ríos retome la actividad desde cero; “No había quedado nada a pesar que, antes de la prohibición, Concordia era la capital de la bodega”.

El escenario nacional

Actualmente 17 provincias del país son productoras, con más de 200 mil hectáreas de vid. El docente afirmó que “Entre Ríos vuelve a apostar nuevamente por el vino. En Victoria hay bodegas muy modernas y en toda la provincia existen más de 60 productores en los departamentos La Paz, Victoria, Nogoyá, Colón, Concordia, Concepción del Uruguay y Gualeguaychú”.

En ese camino, Isaack participó, en el 2010 como representante de la Facultad, en la conformación de la Asociación de Vitivinicultores de Entre Ríos, con un plan estratégico que se llamó Pevi 2010-2020, cuyo objetivo fue llegar a 500 hectáreas. “No se ha llegado de ninguna manera, actualmente existen alrededor de 100 hectáreas”. Remarcó además que “es una tarea que lleva mucho trabajo interdisciplinario, con ingenieros agrónomos y enólogos para que prospere, en nuestra zona se puede obtener un vino excelente y de calidad”.

Enología en la Facultad

Isaack está al frente de la cátedra de Etnología e Industria de la Fermentación de la Facultad desde hace 40 años, “hemos establecido contacto con bodegas de Mendoza y locales con la firma de convenios para que los estudiantes tengan experiencia de la actividad. También, elaboramos vinos desde que comenzamos con la cátedra, con uvas mendocinas y locales, de manera artesanal para que los estudiantes puedan ver la técnica, los controles, etc”. Y en ese sentido, “la idea para este año era empezar a trabajar en las bodegas en Gualeguaychú. Es interesante para nosotros, porque los estudiantes pueden ir al campo, traer muestras y analizarlas en el laboratorio”.

Fuente: Uner Noticias.

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