Ante la amenaza de cierre de la carrera de Física en el Instituto de Formación Docente L.F. Leloir (IFD), desde la Asociación Gremial del Magisterio de Entre Ríos (Agmer) Gualeguay expresaron a AIM la “preocupación acerca de esta decisión enmascarada de reconversión de la carrera en aspectos que no contienen las demandas de jóvenes estudiantes para la vida y el trabajo, donde se desconoce el por qué de tal determinación sin el correspondiente trabajo de campo para disponer que es una prioridad para nuestro departamento”.
Desde el sindicato explicaron que la comunidad educativa no fue “partícipe para arribar a una tecnicatura cuya salida laboral es acotada y solo da mayor sentido a los docentes implicados en los espacios afines a la formación, dejando de lado lo fundamental del sistema educativo, es decir, los espacios obligatorios para la formación de la educación secundaria”.
“Entendemos que esta política que hoy se intenta llevar adelante en nuestro Instituto Leloir obedece a satisfacer los requerimientos del ministerio de Educación de la Nación, que encarna un brutal ajuste desde la Formación Docente, la Educación Secundaria 2030, la reducción en la carga horaria y fomento del trabajo infantil a partir del 5to. año con pasantías en empresas y sin remuneración alguna; la reducción del presupuesto educativo en todas las áreas y la eliminación casi en su totalidad de presupuesto para garantizar infraestructura en el nivel inicial obligatorio con la construcción de salas de 4 años tal lo fija la Ley de Educación Nacional”.
Sin embargo, estos ajustes que en Entre Ríos a partir de resoluciones alternativas desde el Consejo General de Educación (CGE), presidido por Marta Irazabal, referidas a maquillar el escenario político generando ambigüedades con la educación “secundaria”, garantizan más del 95 por ciento de las continuidades de las carreras de los Institutos de Formación Docente, no es más que el paso previo para proceder al ajuste prometido con la firma en el Consejo Federal de Educación (CFE) para la creación de la Comisión Nacional de Evaluación y Acreditación de Institutos de Formación Docente (Coneafod) como el instrumento de achique para garantizar recursos económicos del estado provincial y así hacer prolijamente los “deberes”.
Estas decisiones “son las que hoy tratan de aplicar al Profesorado de Física de nuestra ciudad como muestra de ejecución de lo concedido en el acta irregular del CFE ante lo cual Ctera expresó públicamente su rotundo rechazo”.
El contexto en el cual se está propiciando esta reconversión inconsulta al interior de la institución generó “opiniones disímiles pues sus actores manifiestan disconformidad por el trabajo llevado adelante y la participación democrática para construir consensos en las demandas a través del trabajo colaborativo que beneficia a la comunidad estudiantil, reforzando así la formación en espacios específicos para la educación secundaria de calidad”.