La paridad en las listas de candidatos debutó este año con un alto grado de cumplimiento pero cierto sabor amargo. El nivel de acatamiento de la ley fue del 96,28 por ciento en todo el país y tan solo se detectaron ocho casos irregulares. Sin embargo, tan solo el 19 por ciento de las nóminas de diputados nacionales son encabezadas por mujeres, lo que refleja todavía una fuerte resistencia más allá del avance logrado.

La Ley 27.412, que debutó este año, estableció que las listas de candidatos a diputados y senadores nacionales deben contener de manera intercalada mujeres y varones desde el primer candidato titular hasta el último suplente. De todos modos, para que la integración equitativa se vea reflejada en la composición del Congreso, habrá que esperar al menos una renovación parlamentaria más.

En la previa de las Paso, se conoció un monitoreo sobre paridad realizado por el Inam (Instituto Nacional de las Mujeres), a cargo de Fabiana Túñez, y la Asociación de Defensores del Pueblo de la República Argentina (Adpra), presidida por el Defensor del Pueblo de la Ciudad, Alejandro Amor.

Según este relevamiento, al que accedió parlamentario.com, de un total de 215 listas analizadas en todo el país se registraron solo ocho con incumplimientos: cinco se produjeron en la provincia de Santa Fe, uno en Córdoba, uno en La Rioja y uno en San Luis. En todos los casos fue porque no cumplieron con la alternancia en el paso de titulares a suplentes, algo que los organismos interpretaron como un “error en la interpretación de la norma”.

En el informe se aclara que de los distritos citados, solo Córdoba cuenta con legislación de paridad a nivel provincial (Ley 8901, del año 2000), mientras que Santa Fe, San Luis y La Rioja solo cuentan con ley de cupo.

¿Cuántas listas de diputados son encabezadas por mujeres? El promedio general es bajo (19,06 por ciento) y según el documento “no se observan sesgos por partidos, sino que tanto la mayor como la menor presencia de mujeres encabezando listas es patrimonio de todo el arco político”.

En las elecciones legislativas de 2017, el mismo monitoreo arrojó que el 21,8 por ciento de las listas presentadas para la categoría diputado nacional fueron encabezadas por mujeres. Es decir que este año se redujo levemente el liderazgo femenino de las listas.

La provincia que presenta una mayor proporción de listas encabezadas por mujeres es Tierra del Fuego, con un 57,14 por ciento (cuatro de las siete listas). En el extremo opuesto se encuentran las provincias de Formosa, Jujuy, Neuquén y Tucumán, donde no hay ninguna nómina encabezada por una mujer.

En el caso del Senado se dio un fenómeno inverso: aumentó casi cinco puntos el porcentaje de mujeres encabezando listas. En 2017 fue del 19,75 por ciento, mientras que este año es del 25,35 por ciento. Hay que tener en cuenta que, como en la Cámara alta se reparten dos bancas por la mayoría y una por la minoría, para alcanzar la paridad definitiva es clave la cantidad de mujeres liderando los binomios.

En ninguno de los ocho distritos que renuevan senadores este año (Ciudad de Buenos Aires, Chaco, Entre Ríos, Neuquén, Río Negro, Salta, Santiago del Estero y Tierra del Fuego) se registraron incumplimientos en cuanto a la ley de paridad. Se analizaron en total 71 listas, de las cuales 18 llevan a una mujer como primera candidata.

La provincia con mayor cantidad de mujeres encabezando listas es Santiago del Estero (55,55 por ciento). El caso más llamativo es el de Entre Ríos, donde ninguna de las ocho listas presentadas es liderada por una mujer.

“El lugar que cada candidato ocupa en una lista es fundamental a la hora de pensar en el modo en que se conformarán las Cámaras, dado que por el sistema de distribución de bancas que existe en nuestro país, las posibilidades de ingresar a ocupar efectivamente el cargo al cual se aspira es sensiblemente menor cuanto más abajo se está en la lista”, explica el informe.

Y concluye que “en este sentido, la inclusión de mujeres encabezando las listas es una clara muestra de una verdadera intención de que esas mujeres efectivamente se conviertan en legisladoras”.

Fuente: El Parlamentario