La nueva colada de lava que se formó el fin de semana y que acapara actualmente la mayor parte del flujo del volcán de La Palma obligó ayer a evacuar a unos 800 vecinos de la parte alta del pueblo de La Laguna (Los Llanos de Aridane) tras coger un camino que hasta ahora no estaba previsto y amenazar una zona habitada.
Esta lengua de lava entró durante el fin de semana en el polígono industrial del Callejón de la Gata, donde ha arrasado naves e infraestructuras como una cementera o un depósito municipal de agua. La destrucción se encamina hacia La Laguna, a unos 10-15 metros por hora.
Los vecinos tuvieron ayer tiempo suficiente para recoger pertenencias, sobre todo documentación, animales domésticos y enseres de valor sentimental. Si la lava sigue esta dirección, sus casas podrían quedar sepultadas bajo la lava. Las autoridades les dieron seis horas, desde las 13 a las 19 horas, para recoger sus cosas y marcharse. Muchos ya llevaban haciéndolo desde el domingo ante el temor de que aquí pase lo mismo que en el arrasado Todoque.
Muebles, encimeras, electrodomésticos e, incluso, las griferías fueron recogidas en las últimas horas por vecinos que han dejado entre lágrimas sus viviendas desnudas. Que la lava se lleve solo aquello que no se puede mover: la estructura. Está previsto que mañana, si la situación lo permite, regresen quienes aún lo necesiten para recoger sus últimas pertenencias. Con estas 800 personas son ya 6.400 los evacuados, unos de forma preventiva y otros porque lo han perdido todo.
Esta colada es un ramal que pertenece a otra lengua de mayor potencia y que avanza de forma paralela a la primigenia, lo que ha provocado un enorme daño a fincas de plataneras y zonas residenciales. Se trata de la lengua de lava que acabó de sepultar lo que quedaba en pie en Todoque. Se dirige al mar, pero aún está a unos 200 metros. La colada primigenia “ha perdido fuelle”, según el director técnico del Plan de Prevención del Riesgo Volcánico, Miguel Ángel Morcuende.
Casi al mismo tiempo que se ordenaba la evacuación de las nuevas zonas próximas a La Laguna se anunciaba el desconfinamiento de los 3.500 vecinos de barrios de El Paso y Los Llanos de Aridane que el lunes por la tarde quedaron encerrados en su casa por los gases contaminantes a raíz del incendio de naves y material químico en un polígono industrial.
La directora del Instituto Geográfico Nacional en Canarias, María José Blanco, destacó ayer el aumento significativo del tremor debido al mayor aporte de magma a la erupción y de gases. Ello alimenta la hipótesis de algunos expertos de que la erupción se realimenta con distintas bolsas de magma. La calidad de aire mejoró ayer gracias al aumento de la inversión térmica hasta los 1.700 metros y la nube de ceniza se desplazó afectando a la operatividad del aeropuerto, en donde se registraron retrasos y cancelaciones. Se prevé que esta situación se mantendrá hasta mañana.