Según indica el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) este fin de semana volverán las lluvias a Paraná. Las temperaturas seguirán siendo altas y las máximas rondarán los 32°. ¿Qué podemos hacer en casa cuándo el tiempo nos obliga a estar encerrados? Te dejamos algunas ideas en esta nota de AIM.

Para la capital entrerriana, el SMN indica que el sábado el cielo se presentará parcialmente nublado a la madrugada y que por la mañana se registren tormentas aisladas. Para la tarde y la noche la situación seguiría igual, con tormentas fuertes.
En tanto, para la jornada se esperan temperaturas mínimas de 21° y máximas de 28°.
El domingo se pronostica que mejore un poco el tiempo pero el cielo seguirá parcialmente nublado, con temperaturas mínimas de 23° y máximas de 32°. El lunes el panorama será similar, habrá chaparrones durante la mañana y para el martes se aguarda nuevamente tormentas para todo el día con un descenso importante de temperatura para las primeras horas de la jornada, con mínimas que alcanzarán los 19°. Después el calor se haría presente con 32°.
Qué hacer con los niños cuando llueve
Aquí ponemos algunos ejemplos para pasar un rato divertido con los más pequeños.
Nuestra propia casa se puede convertir en un hervidero de ideas para estos días lluviosos. Si el plan que se tenía era salir a dar un paseo, ¿por qué no hacer una acampada en el living? Extender una manta, hacer una tienda de campaña, preparar algo rico y a disfrutar.
Otras actividades para mantener a los niños entretenidos pueden ser los rompecabezas. Con ellos además apostaremos por el aprendizaje y a que los pequeños desarrollen sus habilidades. Otra opción son los juegos de mesa.
Por supuesto, un niño que lee es un adulto informado. Aprovechemos estos días para inculcar a nuestros hijos el placer de la lectura, y lo importante que es leer. Obviamente no hay que esperar a que llueva para que nos vean leyendo, pero estos días son ideales para tomar conciencia de ello, y destinar un rato a la lectura.
A nadie le amarga un dulce, y mucho menos un día de lluvia. Además, a los niños les gusta enredar, mezclar y jugar con las manos, y todo eso se puede hacer en la cocina. Preparar un bizcocho o hacer una tarta entre todos los miembros de la familia será una actividad doblemente divertida, la primera mientras se preparara y la segunda mientras se degusta.
Y ya que estamos haciendo cosas con las manos, las manualidades siempre han sido una buena opción para pasar el rato dentro de casa. Hacer collares, pintar cartulinas, o reciclar botes de plástico y convertirlos en animales o piezas decorativas son algunas de las manualidades que podemos hacer sin salir de casa. En Pinterest hay muchísimas ideas para llevar a cabo.
Gracias a las nuevas tecnologías, otra de las actividades que más llaman la atención a los niños son las videoconferencias. Podemos aprovechar para hablar y ver a nuestro interlocutor en la pantalla del ordenador, quizá a los abuelos o a una tía que viva lejos o a unos amigos que conocimos en vacaciones. Otra manera de relacionarnos.
Otra opción para disfrutar de la lluvia sin mojarnos son los centros comerciales, en los que podemos encontrar entretenimiento para los niños, pero también para los más mayores. Los establecimientos se suman a las guarderías, donde el buen tiempo está asegurado, además se puede aprovechar y ver una película que guste a todo el mundo. Eso sí, a la hora de comprar las entradas de cine hay que darse cuenta de las edades de nuestros hijos.
Ideas para grandes
Cuando la lluvia no da tregua hay actividades que pueden ser de mucha utilidad, tanto para sentirse bien como para solucionar pequeñas cosas que siempre son postergadas para otro momento porque no hay tiempo, porque es preferible aprovechar del sol o simplemente porque siempre son dejadas para mañana.
Ordenar un placard, cajones olvidados o cuartos de servicio pueden ser algunas de ellas. También acciones que puedan contribuir al cuidado personal y no sólo de la casa como un delicioso baño de inmersión con la bañadera repleta, algunas sales, buena música y hasta quizás un libro.
Hay quienes aman la lluvia y les gusta dar un paseo sin paraguas para disfrutar de las gotas al caer. En esos casos, siempre es bueno darse un baño caliente para recuperar la temperatura y no pescar un gran resfrío. Y para quienes tienen auto, ir al shopping, hacer la compra del mes en el supermercado o recorrer museos que siempre estuvieron en la agenda pero nunca se visitaron.
Para quienes no desean asomar la nariz y prefieren quedarse en casa, es posible aprovechar el tiempo y desempolvar ropa que dejamos guardada porque tenía un pequeño agujero o le faltaba un botón. Es decir, arreglar esas pequeñas cosas que se dejaron de usar sólo por no dedicarles algunos instantes.
De igual manera, reparar esas cosas de la casa a las que uno ya se acostumbró a ver mal pero todos los días quisiera cambiar. Desde una lámpara, una llave de luz, el cuerito de una canilla o, por qué no, ordenar esa caja de herramientas en la que cuando se necesita algo es imposible acceder.
Los días oscuros y lluviosos no son tan malos como parecen: en el caso de las mujeres, es una buena oportunidad para dedicarse al cuidado del cuerpo y el cabello. Baños de crema siempre postergados, depilación, cremas y hasta dejar las uñas como si hubiesen estado en la manicura. Y por qué no hacer esos ejercicios que siempre parecen en las revistas, que parecen súper simples pero nunca hay tiempo para realizarlos.
Los fanáticos de la computadora tienen varias opciones posibles, como hacer trámites vía internet, investigar sobre temas que siempre interesaron y nunca tuvieron tiempo, visitar páginas de turismo, y comunicarse con gente a la que hace tiempo no le escribían un mail. Hablar por teléfono no es una opción recomendable porque cuando llega la cuenta odiarán haber estado horas conversando con alguien.
En el caso de los más chicos un buen torneo de play station los puede tener entretenidos por varios días. Incluso es posible incentivarlos para que aprender a hacer manualidades, como crear objetos útiles con arcilla, pintar esténciles y hacer una guarda para los cuartos.
Uno o varios días adentro de casa no necesariamente deben ser rutinarios, dedicarse a los placeres propios es una de las mejores opciones. El cable a tierra que todos necesitan puede realizarse a falta de sol y actividades al aire libre, como pintar un cuadro, tejer en telar, sacar fotografías extrañas, recuperar las plantas o tocar el instrumento amado y que todos los vecinos recuerden que uno es músico y le gusta experimentar. Incluso, para fanáticos, ahora es posible encontrar series completas de televisión.
En las anteriores opciones no era necesario tener una compañía para llevarlas a cabo, pero también en los días lluviosos es bueno juntarse con amigos que hace mucho no se ven y disfrutar de una buena y elaborada comida, de unos mates, un vino o interminables charlas.
Y en pareja es bueno aprovechar para tener acercamientos, compartir actividades y diagramar, por qué no, las próximas vacaciones que podrán disfrutar juntos. Preparar la cena romántica postergada bajo la luz de la vela. Y realizarse masajes mutuamente para sacar las tensiones del trabajo y poder descansar mejor.