En el día internacional de la Lucha por la Eliminación de la Violencia hacia las Mujeres, este lunes hubo movilizaciones en todo el país y una concentración central frente al Congreso de la nación contra los femicidios, los abusos sexuales y las distintas violencias que se ejercen contra las mujeres.

"Los familiares atravesados por el femicidio somos las voces de las que callaron. Tratamos de concientizar, visibilizar y poner en relieve que en cada una de nuestras familias hay una mujer menos", le expresó a Crónica con dolor Eva Domínguez, familiar de Vanesa Soledad Selma, asesinada por su pareja quien le quemó el 35 por ciento de su cuerpo.

Domínguez llegó con otros 88 familiares que asistieron a esta jornada histórica desde distintos puntos del país, exigiendo justicia por los 80 femicidios contra las mujeres que ya no están y por quienes gritaron "presente" ante sus rostros impresos en cruces con sus nombres y sus fechas de muerte.

"Hoy tenemos muchas familias desmembradas, hermanos que se han suicidado, hijos que han quedado huérfanos con un padre preso, pero sin embargo con el derecho a revincularse", explicó Domínguez, y agregó: "Exigimos la quita de responsabilidad parental para el femicida y exigimos la Ley Brisa para todos los niños de la República Argentina que es grande y es muy amplia, y no a todos lados llega esta ley".

Nieves Aguilar, referente del Colectivo No Matarás también estuvo presente en esta jornada de visibilización y lucha contra la violencia hacia las mujeres. "Es un día para tener memoria, para estar presente, es un día que entendemos que con Ni Una Menos se ganaron las calles. Desde entonces entendemos que son femicidios, que ya no es violencia pasional y eso es un despertar", expresó.

Hay un femicidio cada 26 horas y para Raquel Vivanco, presidenta del Observatorio Ahora que sí nos ven, de mantenerse este promedio "el 2019 cerraría con uno de los índices más altos de los últimos cuatro años" luego del movimiento Ni Una Menos que arrancó en 2015. "Es un panorama terrible el que tenemos las mujeres y diversidades en nuestro país", alertó.

"Esta es una jornada de lucha, no es la única en el año. Los 25 de noviembre cobran un valor particular por eso volvemos a la calle, volvemos a exigir que dejen de matarnos", dijo la presidenta del Observatorio.

A los reclamos por los femicidios, las violencias y las desigualdades contra las mujeres, se sumó el lema "Golpes nunca más" por la soberanía de los cuerpos y los territorios, en referencia al golpe de Estado y las violaciones a los derechos humanos cometidos en estos últimos días contra las mujeres en Bolivia y la represión en Chile. "Las polleras siguen resistiendo" gritaba la bandera que llevaba al frente la concentración.

"Muchas de nuestras organizaciones están compuestas por compañeras que son de Bolivia, de este país que hoy está resistiendo a un Golpe de Estado terrible, que está arremetiendo contra la vida de los y las bolivianas y por supuesto también las mujeres que llevan adelante una buena parte de la resistencia pero que tienen el mayor riesgo por los delitos sexuales que se comenten en contextos de estas características", explicó Vivanco.

La movilización que se llevó adelante en todo el país y que se concentró principalmente en la Plaza Congreso en la Ciudad de Buenos Aires, contó durante toda la jornada con una radio abierta, distintas intervenciones con la palabra referentes y finalizó con un pañuelazo.

"En la agenda que venimos construyendo después del 3 de junio de 2015, el grito de 'Ni Una Menos' trascendió a las organizaciones de mujeres y feministas para ser ya un grito de la sociedad. Y eso también se refleja en la concurrencia y en la participación de la gente en cada una de estas fechas", concluyó Vivanco.