Desde este viernes aumentan los precios de los combustibles. Los incrementos serían: de un cinco para la nafta súper, siete para la diésel, 3,6 para la Premium y 4,1 para la diésel Premium.
Los combustibles ya llevan una suba superior al 65 por ciento promedio durante 2018 y desde las compañías petroleras venían advirtiendo que aún se registraba un retraso de los precios internos con respecto a los valores internacionales.
Los datos del consumo de combustibles habían registrado en septiembre los peores indicadores en varios años. De acuerdo a la cámara que agrupa a las estaciones de servicio la caída en la venta de naftas y gasoil fue 6,65 por ciento, al comparar los valores de este año con los del mismo periodo de 2017. Y si se compara lo que pasó mes a mes, de agosto a septiembre la venta cayó 10,20 por ciento.
Hubo un derrumbe en los despachos de nafta premium con una baja de 27,50. El gasoil baja 7,84 y la súper, 4,95, siempre en comparación con setiembre de 2017. "Hasta ahora la gente venía restringiendo calidad de producto, migrando de la premium a la súper, por eso la demanda general se mantenía relativamente estable", explica Carlos Gold, presidente de la Confederación de Entidades del Comercio de Hidrocarburos de Argentina (Cecha).