El estado de Michoacán está en el centro sur de México, cerca del océano Pacífico. Fue sede de la cultura purépecha desde mucho antes de la invasión española que llegó al lugar en 1521. En en Cherán K'eri, en 2011, un movimiento encabezado por mujeres echó a los políticos y a la policía del Estado con el propósito de defender los bosques que dieron sustento a la comunidad purépecha desde siempre y expulsar a los narcotraficantes y a todos los delincuentes crecidos a su sombra.


El llamado "imperio purépecha", aplicando a su organización política un concepto europeo, abarcaba antes de la invasión española Michoacán y parte de los estados vecinos actuales, y supo oponerse y contener a los mexicas rivales.

Cherán es una de los 22 poblaciones de Michoacán. Tiene unos 20.000 habitantes y no sería notable salvo porque en un país tan machista como México, en 2011 un movimiento encabezado por mujeres echó a los políticos y a la policía del Estado con el propósito de defender los bosques que dieron sustento a la comunidad purépecha desde siempre y expulsar a los narcotraficantes y a todos los delincuentes crecidos a su sombra.

En Cherán había empresas madereras ajenas a la población local, que hacían su negocio talando los árboles del bosque y dejando tierra arrasada. Fueron las mujeres las que encabezaron el movimiento que echó a los políticos y su escandalosa propaganda proselitista, a los policías corruptos, al Estado mexicano en general y asumió las tradicionales formas comunitarias de gobierno, que no están olvidadas a pesar de los siglos de avasallamiento.

La población se declaró cansada de los homicidios y secuestros que se habían vuelto rutinarios y de cobros extorsivos a pequeños negocios, perpetrados por enmascarados.

El levantamiento de Cherán se produjo en abril de 2011 cuando buena parte de la población civil enfrentó a los madereros, al crimen organizado, a la política y a la policía, considerados todos piezas de un mecanismo que se apoyaban mutuamente.

El Estado y sus secuaces fue derrotado y comenzó en Cherán el ejercicio de usos y costumbres ancestrales de los purépechas, que están mal registrados por una historia que considera que su forma de administración fue un imperio teocrático, cuando en realidad tanto la teocracia como la idea de imperio eran y siguen siendo ajenas a su mentalidad.

Entonces la gente de Cherán cayó en la cuenta de que no necesita de partidos políticos para organizar su vida. Antes del levantamiento había elecciones dispuestas; pero los vehículos de propaganda política fueron detenidos y confiscados, y las leyendas en las ventanillas con imágenes de los candidatos, retiradas. Los bosques que caían bajo la sierra de los madereros son sagrados para los purépechas. En 2008 llegaron narcotraficantes y los ocuparon para talar los árboles y la comunidad, antes tranquila, se vio alterada por robos, homicidios y desapariciones.

El levantamiento del 15 de abril de 2011 construyó barricadas a la entrada de Cherán, impidió la entrada de los madereros y la gente que los seguía y expulsó al intendente por considerarlo ligado a los criminales, si no criminal él mismo.

El presidente del Consejo Mayor de Cherán, Pedro Chávez Sánchez, declaró haberse levantado en defensa del bosque y por la seguridad, en volver a la libre determinación basada en los usos y costumbres relegados por el invasor pero nunca olvidados por ellos. "Se acordó que no más partidos, no más policía y no más un ayuntamiento convencional. "Ya teníamos información acerca del derecho de los pueblos originarios a la libre determinación”.

Cherán obtuvo el reconocimiento del derecho a elegir sus autoridades según los usos y costumbres tradicionales según la Declaración de las Naciones Unidas sobre los

Derechos de los Pueblos Indígenas
Un abogado indígena que hizo las presentaciones judiciales explicó que buscaron retomar y fortalecer instituciones que como pueblo purépecha tenían antes de la Colonia, como el Concejo Mayor de Gobierno”.

En México hay experiencias similares, como la Oaxaca, donde los presidentes municipales son elegidos sin partidos ni representación.

Según los relatos, la madruga del 15 de abril de 2011 las campanas del municipio de Cherán retumbaron para alertar a la población sobre un movimiento para enfrentar a la devastación.

Los partidos políticos fueron prohibidos para evitar divisiones internas y los purépechas volvieron a la unión comunal puesta por sobre intereses individuales.

El levantamiento contra la policía, los políticos y las instituciones que los respaldan, fue una respuesta a la deforestación de 17.000 hectáreas a partir de 2008, de las que ya están reforestadas 3.000.

Además, la nueva autonomía permitió construir un captador de aguas de lluvia en el cerro Kukundicata, que es el más grande de nuestro continente y permite garantizar agua para toda la comunidad.
De la Redacción de AIM.