Se trata de una planta endémica de la región silvestre que prolifera en malezas y plantas secas en las zonas mediterráneas. Se caracteriza por presentar largos tallos con una corona de pequeñas florecitas de color malva. Florece y se recolecta en junio. Se puede cultivar en macetas que presentan una elevada resistencia y capacidad ornamental.

La lavanda es una planta aromática con excelentes propiedades medicinales debido a que es relajante, induce el sueño, calma los espasmos musculares e intestinales, alivia dolores, migrañas y neuralgias, es antiinflamatoria, antiséptica y cicatrizante de úlceras y heridas. Es una planta digestiva y carminativa. También se usa para perfumar ropa y estancias y para elaborar colonias y perfumes.

¿Cómo se emplea la lavanda?
Infusiones de lavanda
Son tés de lavanda elaborados con cocciones en agua caliente de hojas secas de lavanda. Se pueden consumir solos o mezclados con otras plantas.

Según la página web Cuerpo y Mente se pueden usar combinados con espino albar, tilo y pasiflora o conjuntados con amapola, valeriana y lúpulo para conciliar mejor el sueño y evitar el insomnio.

Se cuecen todas las plantas en una cazuela llena de agua hirviendo durante 10 minutos.

Si queremos remediar el mal olor de los pies se hierven hojas de lavanda junto con salvia en una cazuela y se cuelan.

Para combatir la hinchazón digestiva y los gases se cuece en agua caliente lavanda con hojas de menta y semillas de hinojo.

Si deseamos tratar el vientre hinchado y los gases se combina lavanda con melisa, hierbaluisa y boldo. Se hierve todo junto en un cazo y se consume.

Lavanda como loción:
La esencia de lavanda se aplica con 10 gotas en la bañera para masajes relajantes o suaves para calmar la tensión muscular y la sobreexcitación nerviosa debidas al estrés o la ansiedad.

Se combina la loción de lavanda con aceite de romero y de almendras dulces específicamente en reumatismos, tortícolis, y se aplica en friegas suaves sobre la zona dolorosa.

Aceite casero de lavanda para masajes se ponen 50 gotas de aceite esencial de lavanda en 100 ml de aceite de almendras y se aplica como masaje en la espalda, la zona cervical, los cuellos y los hombros.

Los beneficios de la lavanda son:

1- Combate el insomnio porque ayuda a conciliar el sueño.

2- Es relajante y vence el estrés y la ansiedad.

3- Calma los dolores, las migrañas, las neuralgias y los espasmos o contracturas musculares.

4- Controla la tensión arterial y las palpitaciones cardiacas.

5- Es digestiva porque alivia las digestiones pesadas o dispepsias y carminativa porque alivia los gases. Combate los trastornos hepatobiliares leves.

6- Combate los procesos inflamatorios de origen reumático o de otra índole como las cistitis o uretritis.

7- Alivia la infección o inflamación de oído como los casos de otitis y de garganta como los problemas de faringitis y laringitis.

Fuente: Libro Estilo de Vida Saludable